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ARSA
y toma, pastillas de goma, gazpacho y pepinos del tal
Moratinos con su triquitraque, arsa y toma que viva ese tío,
que tiene al Rocío en vez de almanaque...
Esta copla no la han cantado Los Amigos de Gines, que metieron
a compás la pavana por un Papa difunto en forma de Sevillanas
del Adiós. Esta copla no la ha cantado Falete, el último
producto de la Factoría Quintero, en esta España donde pasamos
de los personajes del patio de los Álvarez Quintero a los
friquis que Jesús Quintero hace millonarios. Pozí, cuñaaaao,
esta copla la ha cantado Moratinos, que ha dado el cante. En
Washington, donde ha ido a comprobar que los americanos no
olvidan a quienes se quedan sentados al paso de su bandera y
retiran sus tropas de Irak, incitando al resto de las naciones
a una deserción universal, Moratinos, tras reunirse con
Condoleezza Rice y preguntado por la fecha de la posible
visita de ZP a Estados Unidos, dio el cante: «No creo que vaya
a ser antes del Rocío.»
Arsa y toma, pastillas de goma, gazpacho y pepinos del tal
Moratinos con su triquitraque, arsa y toma que viva ese tío,
que tiene al Rocío en vez de almanaque...
Lo callado que se tenía Moratinos lo rociero que era. Ahora me
explico el inglés de Moratinos, que habla el inglés mucho peor
que ZP el francés, si ello es posible. Moratinos no habla
inglés con acento de Oxford: es con acento almonteño. Cuando
pronunciaba en inglés la palabra «obstáculo» se estaba
refiriendo, naturalmente, a un obstáculo tan universalmente
conocido como la reja de la ermita del Rocío. Decía tan
malamente «there are not obstaculs» porque en realidad quería
decir «salta la reja, almonteño». El rociero Moratinos, harto
de ver a los almonteños saltar la reja de la Virgen, cuando
contempló los barrotes de hierro pelado que rodean a la Casa
Blanca le pasó como a Manolito, el primo de Rocío Jurado,
cuando la chipionera universal le contó su primer viaje
triunfal como artista a Nueva York. Manolito oyó el relato de
la más grande sobre la ciudad de los rascacielos y resumió:
-Total, Rocío, que Nueva York es lo mismo que Chipiona, pero
con las casas más altas, ¿no?
Moratinos, primo Manolito de Rocío y del Rocío, llegó a la
Casa Blanca y resumió:
-Total, Condoleezza, que la reja de la Casa Blanca es como la
de la Virgen... Y si los almonteños saltan la reja, ¿por qué
no la va a saltar ZP? Ellos sacan a la Blanca Paloma y
nosotros quitamos el borrón que hemos echado en la Casa
Blanca, cucurrucucú, paloma mía. Así que en cuanto pase el
Rocío, ZP salta esta reja.
En Washington, como bien saben, no conocen otra cosa que el
Rocío. De allí, por ejemplo, viene la Hermandad de Georgetown,
cuyo hermano mayor honorario es Aznar. Qué bien suenan los
tamboriles, cómo estallan los cohetes cuando la carreta del
Simpecado de la Hermandad de Georgetown viene con trescientas
carriolas por la Pennsylvania Avenue... De punta se me ponen
los vellos pensando en esa Hermandad de Georgetown cuando
cruza el río Potomac, como canta la sevillana: «Al cruzar el
Potomac / me quedé frío / mirando el almanaque / de Moratinos».
¿Y luego, cuando embarcan en Norfolk de Barrameda, esos
lanchones camino del Coto de Doñana? Mira, mira los vellos: de
punta... Si Moratinos hubiera dicho que ZP iba a Washington
después del Día de Acción de Gracias o antes del Labour Day,
Conzolezza Rice, que va siempre con Triana, no se hubiera
enterado ni de papa. Por eso más clarito no lo ha podido
decir: «No creo que vaya a ser antes del Rocío».
Lo que no cuentan las crónicas y yo sé de muy buena tinta es
lo que le repreguntó Condoleezza Rice a Moratinos:
-¿Pero del Rocío de Pentecostés o del Rocío Chico?
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