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HA
muerto Rostropóvich. Que era colega de ZP. Mucho
más que Rostropóvich, el que está aquí tocando el
violón es ZP. Un violón desafinado, sin cuerdas,
que no suena. El se hace la ilusión que es el
mejor chelista del mundo. Y como tiene alrededor
una nómina de bailadores del agua y agradadores,
se cree que la suya es música celestial, cuando no
pasa de un trágico pito de caña que está
destrozando a España. Se quejan muchos de que el
que toca el violón en la Moncloa está recluido
siempre allí, que no tiene contacto real con la
calle ni con la gente, como se vio con la
respuesta de los 80 céntimos cuando en el programa
del Mienmano de la Milá le lanzaron una pregunta
en puntas, no con los pitones afeitados como las
restantes:
- ¿Zetapé, quiés
café?
- No, gracias,
generoso, que lo tomé en denantes y me costó 80
céntimos.
El que llaman
síndrome de la Moncloa existe. Y es altamente
conveniente para España. ¿Cómo va a salir ZP de la
Moncloa, si está allí a gastos pagados, a piscina
climatizada pagada, en el mejor y más feliz de los
mundos? A Rajoy también le hicieron su pregunta
del café, que era la pregunta maleducada del:
¿Cuánto gana usted?
- ¿Y a usted qué
moño le importa?
Eso tenía que haber
respondido Rajoy. Si no tuviera en todo lo alto el
complejazo del acarajotamiento de la derecha. Pero
no respondió, porque le daba corte. La derecha se
avergüenza de todo. Hasta de serlo. Tarde y mal,
Rajoy ha dicho ahora que gana 8.000 euros. Dicen
que 600 euros al mes más que los que gana ZP.
¿Seguro? No, ZP gana siete mil millones de veces
más que Rajoy, porque está en el Villa Pescuezo de
la Moncloa, donde todo es gratis total. ZP no
tiene que pagar asistenta, ni cocinero, ni luz, ni
gas, ni agua, ni teléfono, ni cuota de la
comunidad de vecinos, ni la reparación de la
lavadora cuando se escacharra, ni gasolina para el
coche, ni seguro multihogar, ni tiene que ir a
Carrefour a llenar el carrito. Nada. Los 7.400
euros al mes que gana ZP son para que ahorre para
la vejez. Le pagamos las vacaciones en Doñana,
gratis total; el veraneo en La Mareta, gratis
total; y hasta los viajecitos a las rebajas de
Londres, gratis total. Mientras que Rajoy, con esa
mierda de 8.000 euros mensuales, tiene que pagar
todo lo que ZP saca de gañote, de válvula, de
mangazo, en Villa Pescuezo.
Donde, mucho que nos
cueste, debería estar permanentemente. Mejor que
no salga de Villa Pescuezo. Cada vez que sale y
habla, sube el pan y baja el PIB. En sentido
estricto. Salió poco antes de la Nochevieja, para
dar la campanada de las 12, 12 de anunciarnos que
en terrorismo estábamos mucho mejor que hacía un
año. Y al día siguiente, cataclás del carrasclás,
qué bonita serenata de los amiguitos suyos de la
ETA: el bombazo de la T 4 en Barajas. Barajas,
como ustedes bien saben, nunca existió. En
Barajas, como ustedes bien saben, nunca pusieron
bomba alguna. Allí no murió inmigrante alguno.
Esos son infundios de los fachas, que no quieren
que culminemos el proceso de paz poniendo en la
calle a los asesinos múltiples y dejando que las
listas electorales de las municipales se
enriquezcan democráticamente con comandos
enteritos de la ETA.
Si ZP se hubiera
callado la boca, quizá nunca habría habido ese
Barajas que ahora no existe, por eso la Policía no
investiga nada. Y si no hubiera puesto un pie en
la Bolsa para el tararí que te vi del Parte de la
Victoria de la Economía, quizá no estarían las
familias echando las cuentas para poder llegar a
fin de mes con una octava parte del sueldo de
Rajoy. Pisar ZP el parqué, el mardito parqué, y
que la Bolsa haya pegado el barquinazo con el
mardito parné, ha sido una y la misma cosa. ¡Qué
puntería para el mal fario tiene este gachó! Dice
que el terrorismo va divino, y, ¡zas!, bombazo en
Barajas. Dice que la economía va de cine, y, ¡zas!,
desplome de la Bolsa, pinchazo de la burbuja
inmobiliaria, el euríbor a 4,25, la hipotecas por
las nubes y a tomar por saco el esplendor
económico. Así que mejor que no salga de la
Moncloa. Que se quede allí quietecito. Tocándole
el violón a sus amiguitos los etarras, que en
agradecimiento por los servicios prestados le van
a pedir un premio Nobel de la Paz para él solito.
