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El Recuadro   

 El fútbol será sin goles

ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


Tranvía con muñidor de La Mortaja

El muñidor de La Mortaja se ha quitado su negro ropón y la medalla de la hermandad. El muñidor de La Mortaja se ha quitado la blanca, alechugada y almidonada gola, sus zapatos de alto copete con hebilla de plata. El muñidor de La Mortaja se ha quitado hasta la gomina ritual de la antigua sevillanía. Ha dejado a un lado a los servidores de librea que escoltarlo suelen con sus faroles de mano, delante de la cruz de manguilla. En los ocultos milagros de Sevilla, el muñidor de La Mortaja, que trabajaba una sola vez al año, cuando el Viernes Santo atardece en vencejos por las espadañas para hacer florecer el silencio en el compás del ex convento de La Paz, ha encontrado una rentable, útil y moderna colocación vestido de paisano.
Porque el muñidor de La Mortaja, señores, se ha colocado de tranviario. Es su tristona campanilla la que suena por la Avenida cuando el tranvía se acerca.
No sé quién lo habrá colocado en el tranvía. Pedazo de empleo. No sé si el hermano mayor de la Antigua, Real e Ilustre Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús Descendido de la Cruz en el Misterio de su Sagrada Mortaja y María Santísima de la Piedad, en oficio firmado por el secretario y con su Vº Bº, le pidió a Fernando Martínez Salcedo, baranda del tranvía y de la Agrupación de Interés Económico del Ayuntamiento, que en plan Bolsa de Caridad colocara al muñidor como fijo de plantilla en el Metrocentro. Puede, incluso, que sea una rufinesco-velazqueña operación de altos vuelos y Palmas Altas. Pues los duendes de la muralla de la Macarena andan jacheando que la Hermandad de la Mortaja había demandado al Ayuntamiento por plagio: que las dieciocho mil catetarias en la Avenida eran una copia descarada de sus dieciocho ciriales. Y que a cambio de retirar el pleito, pues el juez iba a decirle al Ayuntamiento que ya se sabe lo que le pasa al que la copia, el Ayuntamiento le ha buscado una colocación la mar de buenecita al muñidor de La Mortaja. Desde entonces el muñidor está que no da abasto, pegando barzones y campanillazos en el tranvía.
Lo supe la otra tarde, cuando, con toda la calor, los citados duendes Narilargo y Rascarrabia me llevaron hasta la recalentada piedra del Arquillo del Ayuntamiento y me pusieron mirando para Coria. Oí a lo lejos, por las Gradas, un ruido ensordecedor. Como el Ave por Brazatortas. No era el Ave. Era el tranvía que se acercaba, El que el municipal folleto «El tranvía a tu paso» describe como «un medio de transporte silencioso». ¡Silencioso por los cojones! El tranvía no es de silencio: es de capa. ¿Cómo podrán dormir los vecinos de por aquí con el tranvía? En estas cavilaciones andaba cuando Narilargo y Rascarrabia me sacaron del sopor de la calor y del ruidazo que acercándose iba, al decirme:
- ¿No escuchas una campana?
- Sí, como la antigua campana del santolio, cuando llevaban el Santísimo a un agonizante. O como la campana que el carrácano que arranca el cortejo de la Sacramental del Sagrario lleva colgada al cuello y va tocando a dos manos.
- No, no desvaríes con la calor --me dijo Narilargo--, y escucha bien ese sonido, más sevillano que todos sus muertos, y nunca mejor dicho lo de los muertos.
Fue entonces, tras la ayudita, y ya acercándose el tranvía al Banco Central, cuando caí en la cuenta del tilín, tilán:
- ¡El tranvìa suena como el muñidor de La Mortaja!
Y los duendes me hicieron la revelación:
- No, no es que suene como la campanilla del muñidor de La Mortaja. Es que el muñidor de La Mortaja se ha colocado de tranviario. La campana que suena para no pillar a la gente es la suya. Por eso lo dice Er Pograma del Tranvía: «Debes escuchar el sonido de la campana que anuncia la llegada del tranvía».
El aviso es lúgubre tañido. El tranvía va hacia la Santa Iglesia Catedral como en estación de penitencia. Tilín, tilán. Escucha, oh sevillano, al muñidor de La Mortaja. Se ha colocado de tranviario. Dobla por la Sevilla que nos mató el tranvía con sus dieciocho negras catenarias a la funerala.

 

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