Andrés Martínez
de León era un genial dibujante de humor de periódicos, tan
famoso en su tiempo como Mingote en el nuestro, que nació en
Coria del Río y que pertenecía a la hoy desconocida y
olvidada burguesía republicana, la de Chaves Nogales,
Martínez Barrio...o Escañuela el del tenis. Era además un
gran pintor y dibujante de temas taurinos, compadre de
Serrano el fotógrafo y tertuliano habitual de Casa Morales.
Y sufrió en sus carnes defender la Tercera España en
aquellos tiempos de convulsión, pues era un hombre libre e
independiente, que lo mismo criticaba a las derechas que a
las izquierdas, y que con su personaje Oselito le dio al
Partido Comunista una estocá hasta la bola que los camaradas
nunca le perdonaron, ni aun cuando Franco lo metió en la
cárcel tras la guerra. En una viñeta pintó a su Oselito con
un compadre que le invitaba a apuntarse al PC. Y Oselito le
respondía:
-- Compare, ¿pero cómo me voy yo a apuntar a un partido que
en el escudo nada más que tiene herramientas de trabajar,
una hoz y un martillo? Si por lo menos tuviera una butaca y
un langostino...
Me he acordado del Oselito de Martínez de León con el
papelón de Izquierda Unida en las negociaciones para formar
gobierno en la Junta. Y con el paripé de referéndum que han
celebrado... para acabar haciendo lo que Valderas quiere.
Valderas proclama demagógicamente la marca de la casa:
"Programa, programa, programa". Pero por lo bajini le exige
a Griñán: "Sillones, sillones, sillones". De nada vale lo
que ha dicho Sánchez Gordillo, que me ha recordado la copla:
"Dice cosas este loco/que a veces no son verdad,/pero
mentira tampoco". Gordillo el de Marinaleda, el del pañuelo
palestino, el que aprovecha su juramento de diputado andaluz
para subvertir el sistema capitalista él solito, ha dicho
algo lleno de sentido común: "Izquierda Unida no puede
pactar con un gobierno corrupto que tiene un exconsejero en
la cárcel".
Bueno, pues IU ha pactado, pacta y pactará. Todo por la
Patria, digo, todo por la Pasta. Todo por el sillón. Y por
la mariscada. Y el más interesado en pactar no es quizá
Valderas, sino Griñán, a pesar de lo que le advirtió Bono:
«Entre aliarme con ese alcalde Gordillo que está defendiendo
las tesis estalinistas y Arenas, yo no tendría dudas.
Aceptaría el planteamiento de Arenas antes que un
planteamiento que conduce al odio social, al enfrentamiento
y a la lucha de clases». ¡Y a la butaca y al langostino,
Pepe Bono! Porque Griñán no se alía con Gordillo, que no
traga, sino con Valderas y con una serie de cesantes
políticos que no quieren "programa, programa, programa",
sino pegar el mangazo de "sillones, sillones, sillones".
Volveremos a ver en la Junta lo del anterior Ayuntamiento de
Sevilla, donde con 25.772 votos el Tío de la Mariscada tenía
cogido por la entrepierna al alcalde y colocado a medio
partido. Valderas no sólo quiere consejerías para ellos
solitos, sino imponer un comisario político en cada una de
ellas y dar un carguete a cada camarada. Volverá a
repetirse, aviso, la dictadura del proletariado que el de la
mariscada impuso en el Ayuntamiento. Con sólo 437.445 votos
que sacó el 25-M, IU mandará de hecho más que el PSOE con
1.523.465 votos. Y por supuesto más que los 1.567.207 votos
del PP como partido ganador, que al no sacar la mayoría
absoluta propició que pactaran esta Mayoría Absolutoria
donde a la gente le da igual la corrupción a la hora del
voto y donde dicen que el encarcelado consejero Fernández es
un "represaliado político", ¡toma ya! El sueño del Oselito
de Martínez de León está punto de cumplirse. En la Junta
mandará el partido de la butaca y el langostino. Pero tela.
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