¿Qué modelo de ciudad tenemos? ¿Existe tal modelo? El anterior Ayuntamiento parece que lo tenía: un modelo para dar por saco a los automovilistas, glorificar a los ciclistas y, peatonalizándolo como parque temático de sí mismo, congelar el centro, lo que entendemos por Sevilla, y contentar a la gentuza que lo tomaba en plan La Bastilla. Que yo sepa, ese modelo no ha sido cambiado. El Ayuntamiento conservador, a pesar de su democrática mayoría absoluta de 20 concejales, 20, repite los esquemas social-comunistas sin revisarlos ni sustituirlos. Al llegar, para contento de muchos, Zoido derogó el Plan Centro del tirón, según lo prometido. Óooole. Y esas calles comerciales recobraron vida, cuando entraron, además, los autobuses hasta El Duque. Óooole. Pero... "Ahí queó". Este cambio del modelo de ciudad no ha tenido persistencia. Parecen gobernar a golpe de continuismo, de improvisación y de máquina de ideas geniales. (Con las bendiciones, además, del arzobispo a la Torre Pelli: asegura que no perjudica para nada ni a la Giralda ni a la visita turística a a Catedral. Para hacerse testigo de Jehová, usted.)
Siguen peatonalizando calles, siguen estrechándolas y en la circulación siguen teniendo cortada a Sevilla en dos. Como si Monteseirín no se hubiera ido. En la Alameda han peatonalizado la calle Pacheco y Núñez de Prado. ¿Por qué? ¿Qué falta hace seguir peatonalizando? Arreglaron, tras muchos meses de obras, Federico Sánchez Bedoya y cuando la abrieron vimos que le habían aplicado la máquina sociata de estrechar calles y poner veladores. No han consentido abrir O´Donnell, y desde La Magdalena hay que seguir llegando hasta la Ronda para ir en taxi a San Pedro. Y en el Postigo del Aceite no quiero ni pensar lo que pueden hacer. Lo tienen patas arriba. Me dicen que lo quieren peatonalizar. ¿A que ponen El Postigo como la Plaza del Pan...con Aceite? Capaces son. Gobiernan rectificando, dando tumbos y continuando sin más los proyectos del Yo-Soy-Médico y del Tío de la Mariscada.
Como las XIII Noches en los Jardines del Alcázar, que hoy comienzan. ¿Por qué? ¿No anunció Javier Landa, delegado del Patronato del Alcázar, que el nuevo Ayuntamiento las iba a suprimir? Pues nada, Zoido metió la marcha atrás y le dijo a Landa que nones, que como los anteriores: que Noches del Alcázar, cueste lo que cueste. Talento al canto. Al canto, a la orquesta, al flamenco, y a todo. Esa cultureta de adorno y goce nocturno del Alcázar estaría muy bien para un Ayuntamiento rico. Pero un Ayuntamiento tieso no puede hacer de empresario cultural y gastarse este año 205.910 euros en 75 conciertos exquisitos y divinos. Cierto que los anteriores se gastaron 272.580 euros en las pasadas Noches alcazareñas. Pero es que no hay que gastarse nada. No es misión del Ayuntamiento meterse a empresario de espectáculos, y darle, encima, la organización a la misma entidad privada que producía para el PSOE estas Noches. ¿Usted sabe a cuánto nos sale cada nochecita del Alcázar, de hoy al 19 de agosto? Pues a 2.745 euros la noche, que son más de 450.000 pesetas. ¿Entra acaso la gente gratis, el clásico gañoteo sevillano? No, el público paga: a 4 euros la entrada y a 5 si la saca por Internet. Y el ciclo cuenta, además, con la colaboración de Cajasol, que no sé cuánto le dará al Ayuntamiento para que organice estas nocturnas, se calle la boca y Zoido vaya a defender la Torre Pelli hasta San Petersburgo, con el frío que hace en San Petersburgo (supongo que el viaje lo pagará Pulido). Cuando el Ayuntamiento no debería aceptar ni un duro de los asesinos del cielo de Sevilla, sino llevarlos a los tribunales como los vecinos del Prado a la Biblioteca Universitaria. Pero tranquilos, que todo está arreglado: en la zapata de la calle Betis piensan poner una mariconada de azulejo tipo Bar Laredo con el nombre de Triana, presssssioso.