Hoy también vamos de papelón de frito variado: pescada, chocos, y cuarto y mitad de adobo. Ah, y póngame usted también un manojo de rábanos, y una rosca de Alcalá, que es tela de clásico en las freidurías. Así que vamos al papelón:

Arriba y abajo.- Loles López es la Nutella del PP en Andalucía. Digo la Nutella porque si el baranda es Nocilla, la que le sigue, la número 2, tiene que ser la Nutella para la merendilla del poder. Y no vean ustedes la que le han liado a la buena señora porque el otro día, en esta continua campaña electoral en que se está convirtiendo la política en nuestra Patria (sí, he dicho "Patria", ¿passsa algo?)... Que venía diciendo que a esta señora el otro día en un discurso se le ocurrió o se le escapó gritar "¡Arriba España!". No vean la que le han liado en la cara y en las redes. Bueno, en Las Redes, en El Pesquero, en Bajo de Guía, en Jaylu, en El Espigón y en todo lo que suene a restaurante de pescado y marisco. A mí no me molesta en absoluto que esta señora haya dicho "¡Arriba España!". Me emociona. Era lo que gritaba Julio Herce, el tío de Isabel, fundador de Falange en la Universidad de Sevilla, al que asesinaron los rojos en Guadalcanal por el imperdonable delito de amar a su Patria. Lo que me ha molestado es que nadie respondiera allí: "¡Arriba siempre!". Que es lo que hay que desear para nuestra nación: lo mejón de lo mejón (y pal que no lo desee, un mojón). Dice mi compadre Ussía que esto del "arriba" es muy divertido. Si tras "arriba" dices "parias de la tierra", eres un progre de cinco estrellas, un demócrata de cinco tenedores y miembro de la Izquierda Caviar de Almodóvar, Bardem y Compañía, los que tienen una sicav para apalear sus millones. Pero si tras la palabra "arriba" mientas a España, a nuestra España, al "adiós, mi España querida" que tienen que cantar ahora por Juanito Valderrama tantos chavales emigrantes con la licenciatura bajo el brazo, camino de Alemania o de Gran Bretaña... Si dices "España" tras "arriba", eres un facha de mucho postín. Y me he enterado que Loles López, con ese grito, ni facha ni leches. Que lo que quería explicar la mujer era una lección de Geografía. A saber: "Arriba España; debajo, Marruecos; encima, Francia; y al lado, Portugal". Donde se compran las toallas.

Escudo.- También está arriba, en Pastor y Landero. Y es del tiempo del "Arriba", diario oficial del Movimiento. Está en el antiguo Mercado de Entradores, actual plaza de abastos del Arenal. Es el escudo de España con el águila de San Juan. El que pone tan nerviosos a los que sacan su inconstitucional bandera tricolor con su escudo de la corona mural y No Passsa Nada. El principal problema que tiene Sevilla, como saben, no es la crisis de Abengoa, ni esos licenciados camino de la emigración, ni el paro de los que tienen hechos los módulos, ni el comercio a dos velas, no... El principal problema que tiene Sevilla es que en el Mercado del Arenal hay un escudo de España de tiempos de Franco. Y los que tienen cogido al alcalde por do más pecado había, pues lo nombraron ellos, han hecho cuestión de Estado Hispalense quitar ese artístico escudo de cerámica de la fábrica de Ramos Rejano, en aplicación de la vengativa Memoria Histórica. Menos mal que se va a resolver el principal problema de Sevilla: el escudo franquista del mercado del Arenal. ¿Y saben cómo? Pues como antes del Concilio los santos en Cuaresma: tapándolo. Eso no es una solución: eso es una vergüenza, que estando Sevilla como está estos señores se dediquen a estas gilipolleces. Históricas, pero gilipolleces.

Convento, no Espacio.- Me pasé todo el tiempo de la desperdiciada mayoría absoluta de Zoido y sus 20 concejales, 20, pidiendo que le devolvieran al Convento de Santa Clara su verdadero nombre y le quitaran ese mote de "Espacio Santa Clara" que le puso Monteseirín en tiempos del Tío de la Mariscada. Bueno, pues han tenido que venir los socialistas de Espadas, los que se ponen nerviosos con el "Arriba España" y tapan los escudos históricos porque quieren imponernos el suyo de la corona mural, para que...¡por fin!, le hayan vuelto a llamar Convento de Santa Clara a lo que toda la vida fue, ha sido y será Convento de Santa Clara. ¡Manda huevos la yema del asunto de Santa Clara, con el que Zoido no se atrevió!

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