ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


 

ABC de Sevilla, 20 de junio  de 2016               
                             
 

Fumata blanca en San Lorenzo

Dejamos el otro día a los sevillanos subiendo al camarín del Gran Poder para besar su santo talón, gastado de tantos labios que le bisbisean una petición o se la dejan escrita en un papelito, doblándolo muy bien dobladito y metiéndolo con mucho cuidado por el resquicio que queda entre su peana y el mármol del altar. Uníamos esos papeles a los que los sevillanos le ponen a Sor Angela. Los sevillanos escriben la certeza de su fe en la esperanza del Gran Poder de Dios, bien directamente, bien tomando como intermediaria a Sor Angela, que menudo "despacho de influencias celestiales" tiene...

Evocaba con esos papelitos nuestras juveniles promesas escritas a la Virgen en Portaceli durante el Mes de María, que solemnemente se quemaban en un pebetero el día 31, ante el altar con la imagen de su Inmaculado Corazón, que da nombre al colegio. ¿Y qué hacen con los papelitos que los sevillanos le dejan al Gran Poder, en la confianza plena de que el Señor los leerá y les concederá la gracia? A la Virgen de los Reyes se le piden las tres gracias cuando el 15 de agosto aparece en la Puerta de los Palos entre nardos y bajo el campanerío glorioso de la Torre Mayor. Al Señor de Sevilla se le pide una sola gracia, sin nardos ni campanas, sólo que con muchas angustias y penurias en el corazón, y se le dejan escritas. ¿Y qué hacen en la hermandad con ellas, con estos impresionantes papelitos? Yo los he descubierto ahora, pero los papelitos bajo la peana del Gran Poder son tan antiguos como su basílica. Y desde que hará unos diez años se quitaron los cuadros con los exvotos, donde los devotos dejaban fotografías y peticiones, se han multiplicado. En San Lorenzo, gracias a Dios, no se ahorra papel como en esas oficinas que tienen una sola impresora común para conmtrolar el consumo de las hojas DIN A-4. El Señor de Sevilla, con su torera Zancada de la pata alante para salvarnos, tiene vendido todo el papel. El que usan los sevillanos para escribirle estas súplicas y dejárselas en su peana, como instancias a la Superioridad a lo divino.

Cada vez que se viste al Señor y sus camareros lo cambian de túnica, se retiran esos papelitos de las peticiones y las promesas, y los guarda la Hermandad a buen recaudo. Los va juntando al cabo del año, y cuando por febrero bailan los seises en la Catedral en el triduo de desagravio a Su Divina Majestad y Potestad, se queman, con la leña de olivo, para preparar la Ceniza del Miércoles con que empieza el rito de la Cuaresma. Leña de olivo. La misma leña de olivo que en el patio de los naranjos de El Salvador, años y años, quemaba para hacer la Ceniza del Miércoles el sacristán Enrique García, que el Cristo del Amor y el Señor de Pasión tendrán en su gloria, a la que llevarían por la Rampla que puso Manuel Casana.

El fuego que arde en ese patio del Salvador con la leña de olivo o en San Lorenzo con los papelitos que los sevillanos le escriben a su Dios y Señor tiene que ser como el del corazón en llamas bajo la cruz del Venerable Mañara en el escudo de su Hermandad de la Santa Caridad. Son los ritos ocultos de las hermandades, un riquísimo patrimonio secreto que se mantiene intacto. Yo oigo ahora coplas de los seises de febrero, y veo en San Lorenzo, quizá en la azotea de la casa hermandad, arder esos papelitos dirigidos al Señor, que "polvo serán, más polvo enamorado" de esas manos que besarán el Domingo de Ramos: "In manu ejus Potestas et Imperium". Yo ahora veo subir al cielo de San Lorenzo (donde nunca se sabe si el Cielo está arriba o allí abajo mismo), el humo de esos papeles que arden entre leños del mismísimo Huerto de los Olivos. El mejor incienso: el incienso de la vida que proclama la fe en la Suprema Potestad del Señor. Ni que decir tiene que es un humo blanco. Fumata blanca que anuncia a Sevilla cada año en la víspera del Miércoles de Ceniza: "Habemus Dominum". El Señor que con el Poder de sus Manos nos acogerá cuando un día nosotros mismos también seamos ya ceniza de olivo y papel...

SOBRE ESTE TEMA DE LAS PETICIONES AL GRAN PODER, EN EL RECUADRO: "PAPELITOS AL SEÑOR" (click para leer el artículo)

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