Clic para ir a ¡HOLA! en Internet

Ir a "¡Hola!" en Internet

De rosa y oro 

                                            por Antonio Burgos


Num. 3069 - 5 de junio del 2003                                    Ir a "¡Hola!" en Internet
Clic para ir a la página principal

Página principal-Inicio


Clic

 
 
Clic para información sobre "Artículos de lujo"

"Artículos de lujo: Sevilla en cien recuadros", nuevo libro de Antonio Burgos

 

"Jazmines en el ojal", editorial La Esfera de los Libros, prólogo de María Dolores Pradera   

"JAZMINES EN EL OJAL",  de Antonio Burgos

 

Artículos anteriores en ¡HOLA!
Recuadros
CON GRANDEZA DE M-30 Artículos anteriores en ¡HOLA!

Cayetana de Alba nos había convidado a almorzar en su Casa de las Dueñas, y en la solemne y grata quietud de la hora sevillana de la siesta tomábamos café en la galería de arcos neomudéjares, ante el color cardenalicio de las buganvillas y el zureo de las tórtolas en las palmeras. En la charlita simpática, una amiga común me dijo:

-- Vamos a pedir que le pongan a Cayetana un busto de bronce en la glorieta que le dedicaron con su nombre, ya que ella defiende siempre tanto a Sevilla. ¿Qué te parece?

-- Poco...

-- ¿Cómo que poco?

-- Sí, que aparte de monumento, como se lo merece de sobra, yo pediría un homenaje más de nuestro tiempo.

-- ¿Como qué?

-- Como una salida de M-30: que le pongan su nombre a una salida de autopista buena, o mejor aun de autovía de circunvalación, en un sitio complicado de circulación, donde haya retenciones frecuentes y la gente tenga mucho tiempo para mirar los letreros de la señalización vertical. La Duquesa de Alba no puede ser menos que el Marqués de Vadillo, ¿dónde vas a comparar? Vadillo es un título de ayer por la mañana como quien dice, del siglo XVIII, que Felipe V dio a un corregidor de Madrid. Pero, a efectos de los letreros de la M-30, Vadillo, que ni tiene grandeza de España ni nada, es más inmemorial que Alba, Medinaceli, Osuna, Medina Sidonia e Infantado juntos. El otro día me llevaba José Miguel Rodríguez Sieiro en su cochazo fantástico por la M-30, y vi que lo del Marqués de Vadillo era ya hasta ofensivo. Se repetían los letreros de salida una y otra vez: "Marqués de Vadillo, a 2.000 metros", "Marqués de Vadillo, a 1.000 metros", "Marqués de Vadillo, a 500 metros"... ¡Qué forma de hacerle la propaganda al Marqués de Vadillo! Y además, con unas letras preciosas. El mundo entero con letras azules y pequeñitas, La Coruña, Mérida, Segovia, menos el Marqués de Vadillo famoso, que tenía unos letreros grandes y bien lindos, con su nombre en negativo sobre un fondo verde. Yo pido para Cayetana en Sevilla por lo menos como lo del Marqués de Vadillo en Madrid: que tenga su salida en la SE-30, o en la autopista de Cádiz, o en la autovía de Huelva, y que el Ministerio de Fomento le rinda el homenaje de esos letreros: "Cayetana de Alba, salida a 1.000 metros", "Cayetana de Alba, salida a 500 metros", "Cayetana de Alba, salida a 100 metros"... Y al llegar a la salida propiamente dicha, allí, ¡zas!, el monumento que proponéis y al que me sumo, pero en esta versión globalizada y postindustrial de la moda romántica de dedicar estatuas y calles a las personas como nuestra querida amiga, dignas de honras públicas y solemnes.

Y alguien más viajado que yo a Madrid me dijo:

-- Pues no sólo es Vadillo el título que goza del tercio de mejora de salida de la M-30. ¡No veas el pedazo de salida que tiene el Conde de Casal, por esa parte sí que hay circulación lenta y ve la gente bien el letrero!

Y quien dice salidas de la M-30 dice estaciones de Metro. En los honores a los héroes sociales nos hemos quedado en el Romanticismo a lo Carlyle, en la calle y en el monumento, y hay que poner en hora el reloj de las honras cívicas. Más que dedicar nombres de calles, honremos a nuestros personajes con lo que yo pido para Cayetana o con algo que también da mucho lustre a un nombre: la estación de Metro. Ya que en Sevilla van a hacer Metro, pidamos que una estación lleve su nombre. Cayetana no va a ser menos que su antepasada Eugenia de Montijo, que tiene estación de Metro en Madrid; ni menos que el Duque de Pastrana, que no vean qué estación tiene. Antes de hacer los trazados de Metro se deberían revisar los nombres del callejero, para que las bocas coincidan con personajes dignos de estación. Así se evitarían muchas injusticias, como que en Madrid Pío XII tenga estación de Metro y no la tenga Juan XXIII, un Papa mucho más popular y santo; que la tengan Miguel Hernández o Antonio Machado y no la haya ni de Juan Ramón Jiménez ni de Luis Cernuda; que en el plano del Metro esté Concha Espina y falten Baroja y Galdós; o que esté Menéndez Pelayo y no esté Menéndez Pidal.

De todo lo cual se infiere que el Rey Nuestro Señor debe reformar cuanto antes el Derecho Nobiliario español. No creo que haya polémica tipo mujeres en la línea de sucesión a los títulos, sino general contento, si Su Majestad reforma el honor de conceder la Grandeza de España a determinados ducados, marquesados y condados. Las nuevas grandezas no deben depender del Ministerio de Justicia, sino de Fomento. Y podría hacer como dos clases en estas grandezas de señalización vertical: grandeza de salida de M-30 y grandeza de salida de M-30 y además estación de Metro. Y si es ya estación de Metro con correspondencia entre líneas, es que ni te cuento: inmemorial a todos los efectos. Como Vadillo, que no tendrá Grandeza de España ni nada, pero cuyo actual titular, don Francisco Javier González de Castejón y Larrañaga, tiene un mayor honor: la Grandeza de Estación de Metro y la Grandeza de Letrero Enorme y Repetido en Concurridísima Salida de M-30.

 

Clic


Clic para ir a ¡HOLA! en Internet Clic para ir a la portada

Indice de artículos de Antonio Burgos en "¡Hola!"

Volver a la portada de El RedCuadroClic para ir a la página principal