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En
las últimas elecciones europeas convinimos todos, y muy
especialmente sus votantes, que la Unión continental no
marcharía como Dios manda mientras no contara con la impagable
participación de Rosa Díez como europarlamentaria. Quedamos en
que un asunto tan importante como Europa no podía dejarse en
manos de los populares, y mucho menos de los liberales, porque
luego pasa lo que pasa. Que con Rosa Díez allí todo sería
distinto, por su entrega, su abnegación, su dedicación a la
causa europea.
Por eso no me explico
cómo puede marchar Europa, cómo Francia ha podido tomar la
presidencia semestral de la Unión, si Rosa no está allí. Ni
se le espera, que es lo más grave. ¿Ha renunciado Rosa Díez
al bien despachado sueldo de europarlamentaria, ya que sus
aspiraciones al cargo de secretaria general del PSOE le impiden
cumplir las promesas que hizo a sus votantes de las maravillas
que iba a hacer con su acta tanto en Brüssel como en
Strasbourg? Me imagino que habrá pedido la excedencia allí
para dedicarse a cabildear votos de delegaciones aquí. No
quiero ni pensar que el futuro del PSOE pase por la presente y
continuada rabona de Rosa Diez en sus obligadas tareas en
Brüssel y en Strasbourg. O tiene el don de la ubicuidad, o
está en todas partes, menos donde le pagan porque esté y cobra
por no estar. Me explico. Si hoy es lunes, esto es Asturias,
donde Rosa está haciendo campaña para lo suyo del partido. Y
si hoy es martes, esto es Murcia, para lo mismo. ¿Hay
instituciones europeas donde ganarse el jornal en Murcia o en
Asturias? A lo mejor las hay, y el futuro del euro, un poner, se
resuelve en Mieres o en Orihuela, en cuyo caso no he dicho nada.
Pero me temo que esta rabona de Rosa en sus obligaciones de
Brüssel y Strasbourg se las pone a Bono como a Fernando VII,
por cuanto el castellano-manchego sigue cavando los tomates
autonómicos todos los días, mientras se va labrando el hombre
un porvenir como candidato a todo lo que se tercie. A cardenal
de Toledo porque no puede, que, si no, también se presentaba
Bono.
P.S.- Lo que he
puesto de Brüssel y Strasbourg, no es errata. Si es Ourense,
Ondarribia y Lleida, ¿cómo voy a ser tan nacionalista español
que me atreva a escribir Bruselas o Estrasburgo?
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