ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


Remeros de la Plaza España

Dicen que van a levantar un monumento a Aníbal González. ¿Para qué, si ese monumento está ya hecho? Desde 1929. El mejor monumento que Sevilla le puede levantar a Aníbal González es mantener como los chorros del oro y no como una pocilga su obra cumbre, la Plaza España. Anoten otra a los duales de Sevilla: la Plaza América y la Plaza España. Siendo tan de Aníbal González como la Plaza España, la Plaza América casi nunca pasa por símbolo de Sevilla. Para los sevillanos el verdadero Aníbal González es el de las dos torres, la fuente, la ría o los retablos provinciales de la Plaza España. Nadie le quita al conjunto el nombre de Aníbal ni el suyo propio. En cambio para muchos la Plaza América es «la plaza de las palomas», y muy pocos la identifican con nuestro arquitecto más popular. Aquí muy pocos saben quién fue Hernán Ruiz, o Juan de Oviedo, o Diego de Riaño, pero todos conocen a Aníbal González e incluso adjudican a su autoría edificios coetáneos de Juan Talavera o de Gómez Millán. Todo lo que tenga ladrillo visto y azulejos tiene que ser de Aníbal.

He pasado por la Plaza España y he comprobado que ni aquello se libra de las vallas de gallinero que acorralan a Sevilla. Sí, acorralan, porque la han convertido en un inmenso corral. A la Plaza España, como a toda Sevilla, le llega la peatonalización. Van a hacer peatonal la Avenida de Isabel la Católica, que para que se enteren es por donde la cofradía del Porvenir viene por el Parque el Domingo de Ramos. ¿Dejarán pasar a los coches de caballos? ¿Dónde aparcarán los autobuses de los turistas?

Con todo esto la Plaza España perderá lo mucho de pulmón de la ciudad que tuvo desde que Aníbal la creó. La Plaza España cumplía las funciones que ahora el Parque del Alamillo. Era donde se llevaba a los niños a montar en bicicleta, donde se echaba la tarde, donde se iba con el almuerzo en una caja de zapatos cuando la Feria del Prado. Y donde, ay, las tardes de los jueves y los domingos los colegios llevaban a pasear a los niños y niñas internos. Que levante el dedo el antiguo interno de los Escolapios, del San Francisco de Paula, de los Jesuitas al que no hayan llevado en fila a echar la tarde en la Plaza España. Algunos de estos internos nos dejó memoria sentimental de aquellas tardes. Por ejemplo, un interno de la Universidad Laboral, que estaba en el edificio de la actual Pablo de Olavide, la obra docente mimada por el franquismo y por el populismo obrerista de Girón de Velasco. Estuvo interno en la Laboral un muchacho de Cuenca que se llamaba José Luis Perales. Los domingos, en el autobús Pegaso color celeste de la Laboral, los llevaban de paseo a la Plaza España. Los amigos de la Clase del 63 juntaban unas perrillas y se montaban en las bar-cas de la ría, entre risas, paquetes de altramuces y quizá furtivos cigarritos Chester. Pasado el tiempo, aquel chaval de la Laboral, convertido en el músico José Luis Perales, se acordó de Sevilla, de la Plaza España, de su ría, de las barcas, y cantó: «Quisiera ser remero de la Plaza España...»

Durante muchos años, nadie ha podido ser remero de la Plaza España, aunque quisiera como Perales. La ría ha estado años y años seca, abandonada, putrefacta, maloliente. De las barcas de nuestra nostalgia juvenil, ¿qué se hizo? ¿qué de aquella barcaza con motor, la «Enriqueta», que los mayores evocan? Ahora, si volviera, José Luis Perales podría ser de nuevo remero de la Plaza España. Dicen que van a llenar de agua otra vez la ría, y a poner las barcas. Ojalá. Las providenciales barcas que en las riadas servían para llevar pan a la Sevilla inundada. Barcas de los recuerdos juveniles de tantos sevillanos, desde las que siempre un interno torpón iba al agua de cabeza. Que vuelvan las barcas para hacernos a todos tan jóvenes como los recuerdos del remero José Luis Perales.

REPORTAJE GRAFICO DE LAS BARCAS DE LA PLAZA DE ESPAÑA EN "LA SEVILLA QUE NO VEMOS" DE JULIO DOMINGUEZ ARJONA

 

Articulos de días anteriores

Ir a página principal (Inicio) de www.antonioburgos.com

 

Para buscar dentro de El RedCuadro

 
    

 

Correo Correo

Clic para ir a la portada

Biografía de Antonio Burgos


 

 

Copyright © 1998 Arco del Postigo S.L. Sevilla, España. 
¿Qué puede encontrar en cada sección de El RedCuadro ?PINCHE AQUI PARA IR AL  "MAPA DE WEB"
 

 

 


 

Página principal-Inicio