Antes era Apología del Terrorismo. Ahora me parece que le dicen Enaltecimiento del Terrorismo. Es un delito tipificado en el Código Penal. Como me imagino que deben de estar tipificada como delitos la exaltación del asesinato, la invitación a la violación de menores, o la defensa del genocidio. Pero que yo sepa nadie ha hecho hasta ahora la apología del robo, el enaltecimiento del mangazo gordo. Y la ha realizado con todos los honores un señor que fue presidente de la Junta y del PSOE, y, sí, lo han llevado algunos periódicos a título, y algo se ha comentado, pero nadie se ha sentido indignado por lo que ha dicho este señor.

Que se llama Manuel Chaves.

Chaves ha hablado a la revista "Vanity Fair". Ésa es otra, que no hace al caso. Yo no sé qué pinta Chaves, tan calvo, gordo y feo, hablando en una revista exquisita dedicada al glamour y al lujerío. Pero ese es el problema de "Vanity Fair" y de Chaves, no el nuestro. El nuestro, como andaluces, es lo que Chaves ha dicho en esa entrevista. Por lo visto se le ha calentado la boca. Ya saben: los locos, los borrachos, los niños y los ex presidentes de la Junta dicen la verdad. Y ha dicho algo que no sé cómo no ha sublevado al personal, por lo mal que nos deja a los andaluces y a todo el personal de la Junta, y por cómo consagra a Andalucía ante España y la Humanidad como el Puerto de Arrebatacapas donde todo el mundo roba y No Passssa Nada.

Aunque sé lo que le pasa al que la copia, voy a copiar íntegras y textuales las palabras de Chaves. La revista le recuerda que la juez Alaya ha dictado auto de imputación contra su persona, por el manejo de la tela marinera de los 1.217 millones de euros presuntamente defraudados en la Trama de los ERE, y he aquí lo que responde el buen señor:

"Es verdad que los controles han fallado. Es cierto que el procedimiento que se estableció fue inadecuado y adoleció de falta de controles. El problema es que en una Administración como es la Junta de Andalucía, con miles de funcionarios y cientos de directores generales, eso es muy difícil de controlar. Sea cual sea el procedimiento más adecuado, con más controles, da igual, si hay un director que quiere cometer un delito, lo comete. Si un director general que gestiona un fondo de equis dinero quiere robar, roba".

Y se quedó vaheando el tío. Y nadie ha dicho nada. Y el PP, pues de perfil y callado, claro, cual suele. Como Rajoy ante esa Audiencia Nacional que suelta a los asesinos de la ETA como Carlos Telmo soltó las palomas pintadas de rosa en la boda de Perera.

Lo que le faltaba a la lamentable imagen de Andalucía (que persista tras más de 30 años de gobernación socialista) era que el antiguo baranda reconociera que esto es Jauja: "El que quiere robar, roba". De los "cuatro golfos", Chaves ha pasado a inculpar a toda la Administración de la Junta. Y voy a lo que ponía al principio: igual que hay delito de apología del terrorismo, ¿esto no es un delito de enaltecimiento del robo, de invitación al mangazo? Y me pregunto lo de siempre: ¿dónde están las manifestaciones de protesta, las pancartas, pegatinas y camisetas de colores de los funcionarios de la Junta, de los directores generales de sus consejerías? Chaves los ha puesto a todos de rateros en potencia. Me recuerda lo de aquel abogado gaditano que le tocó en turno de oficio defender a un pobre hombre que había robado unas gallinas en un cortijo. Y en su defensa se le ocurrió decir:

-- Sí, señoría, este hombre ha robado. ¿Y qué pasa? ¿No roban acaso los militares, no roban los funcionarios, no roban los curas?

Yo creo que en su autodefensa ante la imputación de Alaya, Chaves ha dicho en "Vanity Fair" lo mismo que aquel abogado de oficio gaditano.