Cuando me preguntan por una ciudad histórica que simbolice a
Andalucía, dudo entre las muchas que, en su conjunto, forman verdaderamente la esencia de
nuestra tierra, a cuál más hermosa. Dudo siempre entre la Antequera de los cien retablos
barrocos, el Arcos de la Frontera y de los Poetas, la Ronda de Rilke y Pedro Romero, la
Carmona de los conventos, la Osuna de las rejas y la cal, el Guadix de murallas doradas,
la Ubeda renacentista... Y la duda aumenta si pienso en una Ecija de torres, una Cazalla
de cartujas, una Aracena de castaños... Por lo cual al final casi siempre me acabo
quedando con Ronda. Los hechos me han demostrado una vez más que no es mala la rondeña
elección como símbolo andaluz.
Porque organizadas por el Excelentísimo Ayuntamiento de
Ronda se han celebrado las famosas Cruces de Mayo en La Cimada, que durante tres días han
llevado a los serranos lo mejor de lo mejor, como la famosa orquesta "Fresa y
Nata", que aunque pueda parecer que se dedica a interpretar el himno de la casa
Frigo, no vean cómo anima el personal cuando ataca piezas de su selecto repertorio, y ora
ordena un pasito palante, María, ora se pregunta qué será lo que tiene el negro, ora
muestra su honda preocupación por lo que le pasa al Probe Migué. Fue completo y diverso
el programa de La Cimada, que para algo hay allí una Hermandad de la Cruz de Mayo, mejor
que en Sevilla. Tanto capilliteo en Sevilla, y no se nos ha ocurrido fundar una Hermandad
de la Cruz de Mayo...
Durante tres días, el 7, 8 y 9 de mayo próximo pasado, en
La Cimera se sucedieron actos culturales tan importantes como el Concurso Gastronómico de
Sopas de Pan, que estaba dotado con cuantiosos premios: mil duritos el primero, tres mil
pesetitas el segundo y ocho mil reales el tercero. En la inauguración de la fiesta no
sólo actuó el ya mentado y famoso grupo "Fresa y Nata", sino que hubo hasta
"servicio de bar, con tapas y raciones variadas a precios populares". Como
pueden comprobar, en La Cimada no se privan de nada. Claro que cuanto aconteció el día 8
no fue nada comparado con los públicos regocijos de la nona jornada del mes de mayo. Hubo
de todo. Quiero decir que no faltó de nada. Desde campeonato de mus con trofeo a carreras
de saco, también con trofeo, ¿qué no daría yo daría por poner en mi curriculum:
"Primer premio en las carreras de sacos de La Cimera, Ronda, 1999"? Cualquier
chaval licenciado en Económicas en paro pone eso en su curriculum, lo manda a Andersen
Consulting, y, ¡hala!, es directamente contratado para la oficina de Bruselas...
Y hubo concurso de tiro de cuerda por grupos de 6, con
trofeo de botella de güisqui, toma ya premio, y competición de Mountain Bike, bicicleta
serrana, vamos... Usted preguntará si no pararon ni para almorzar, con tanta fiesta. Pues
sí. Pararon para almorzar. Y para cenar. A las 14,00 fue la "Gran Paella,
patrocinada por el Partido Popular". ¿Y la cena? Pues a las 20,00 fue la "Gran
Chorizada, patrocinada por el PSOE". Tal como se lo estoy contando. El PP patrocinó
la Gran Paella, porque el PP es quizá una gran paella de liberales, centristas,
reformistas y derecha vergonzante, y el PSOE patrocinó la Gran Chorizada por lo que no te
quiero ni contar...
Ah, después de la Gran Chorizada patrocinada por el PSOE
hubo Gran Verbena. Siempre que el PSOE patrocina una Gran Chorizada hay al final una Gran
Verbena. El personal suele festejar por aquí más las grandes chorizadas del PSOE que las
grandes paellas del PP.