La Junta pide el rescate a Madrid, Madrid medita pedir el
rescate a Europa... ¿Y quién nos rescata a nosotros del
despilfarro que se siguen trayendo los políticos, tanto
nacionales como autonómicos, provinciales o locales? Hijos
míos: en vez de pedir el rescate, a ver si os enteráis que
no sois una casta aparte, que sois iguales que quienes nos
tenemos que apretar el cinturón. A ver si dejáis de tirar el
dinero de una vez... He aquí cómo me estoy quedando sin
hojas en la libretilla de los temas de artículos, de anotar
allí tantos despilfarros como traen los periódicos, a saber:
La Generalidad de Cataluña gasta 500 millones de euros al
año en promocionar el independentismo. El Ayuntamiento de
Barcelona gastará 1.900 millones de euros en su plan
independentista. El alquiler del local de la "embajada" de
la Generalidad de Cataluña en Bruselas cuesta al año 832.000
euros. El alquiler del local de la "embajada" de la
Generalidad en Nueva York cuesta al año 473.000 euros. El
alquiler de la "embajada" de la Junta de Andalucía en
Bruselas cuesta 130.000 euros al año. El alquiler de la
"embajada" de la Junta de Andalucía en Madrid (donde
colocaron al novio de Bibiana Aido) cuesta 170.000 euros al
año.
La Junta se gasta 4 millones de euros en el sistema de
apuntar las faltas escolares de asistencia a clase. La Junta
debe al Ayuntamiento de Sevilla 5,8 millones de euros en
materia de Dependencia (que no son los dependientes del
Cortinglés y las dependientas de Zara, sino los impedidos
que necesitan ayuda). El coste final del nuevo Fibes
asciende a 160 millones de euros, el doble de lo
presupuestado, de los que la Diputación aún debe aportar
900.000 euros. El conflicto de Arte Sacro costó al
Ayuntamiento de Sevilla más de 1 millón de euros. Cataluña
gasta 800.000 euros en montar su propia Agencia Tributaria
de la Señorita Montse. La Junta gastará 8.400 euros al mes
en alquilar un local para el Juzgado de Cazalla de la
Sierra, ¡qué pedazo de juzgado, hijo!
El mantenimiento de los pinganillos de traducción simultánea
en el Senado cuesta 12.000 euros por sesión. El Senado nos
cuesta 53,2 millones de euros al año (y ésta es la hora en
que nadie ha sabido explicar para qué puñetas sirve el
Senado). La protesta del 15-S obligó al Ministerio del
Interior a montar un dispositivo policial que sólo en dietas
de los agentes costó 200.000 euros. (Aún no se sabe cuánto
nos ha costado el dispositivo contra la chusma del 25-S.)
La Diputación de Sevilla gastará 2,5 millones de euros en el
Carril Bici del Aljarafe. (Menos mal: yo es que tenía
perdido el sueño. Me despertaba de madrugada pensando:
¿habrá por fin Carril Bici en el Aljarafe, Dios mío de mi
alma, con la falta que está haciendo un Carril Bici en el
Aljarafe?). El Gobierno gastó 3,2 millones de euros en
cartas a los jubilados para informarles de la revalorización
de las pensiones y del aumento del IRPF. La Junta gastó
70.000 euros en buscar los restos de García Lorca en un
sitio equivocado. La Junta destina otros 306.000 euros más
para la mal llamada Memoria Histórica. El Gobierno gastó
12.331 euros en una peregrinación de militares y guardias
civiles a Lourdes. El alcalde de Otura (Granada) gastó más
de 80.000 euros en aperitivos y cáterin durante 2011. En lo
que va de año el cáterin de comidas y bebidas a bordo de los
aviones oficiales del Gobierno tipo Falcon y Airbus nos
lleva costados 128.402 euros. Limpiar las bolsas, cristales,
vasos de plástico, guarrerías, micciones y vomitonas que
dejan los niñatos (y niñatas) tras las botellonas nos cuesta
al año a los sevillanos 1,2 millones de euros que tiene que
pagar el Ayuntamiento.
La Junta retrasa a 2013 la bajada de sueldo de los altos
cargos. ¡Óooooooooooole!
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