ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


 

ABC de Sevilla, 17 de octubre de 2015                 
                                
 

Talleres de fornicio

Hasta ahora un taller era donde una modista le hacía un vestido a su señora con una tela maravillosa comprada a Pepe Curado en la Cuesta del Rosario. O donde un mecánico le arreglaba su coche. Ya no. Ahora taller es un sitio donde se enseñan cosas. Por ejemplo, en los colegios, en cuyos talleres se enseñan las que en los viejos planes de estudio se llamaban "asignaturas de adorno", como Música, Dibujo o Costura. Y fuera de los colegios, en las asociaciones de vecinos o en los hogares del pensionista, en los talleres se enseñan las cosas más insólitas. Verbigracia: "Taller de Encaje de Bolillos", "Taller de Encuadernación", "Taller de Zumba".

Por un escandaloso gasto municipal me entero que en los institutos de Secundaria hay Talleres de Fornicio. Renuncio al manido chiste del chaval al que su padre sorprende en plena floración de una magnolia y dice el chiquillo: "Es que me he traído trabajo a casa del Taller de Educación Sexual"... Pero eso es así, en serio. Desde el 2008, con Monteseirín, el Ayuntamiento patrocina estos Talleres de Fornicio en los institutos. Con un nombre precioso: "Plan de Promoción y Protección de la Salud Afectiva Sexual de los y las Sevillanas". ¿Y de los fandangos no? ¿Sólo de las sevillanas? ¿Será esta relación de las sevillanas con el fornicio por culpa de la voluptuosa letra de Manolo Melado, la del "Mírala, cara a cara", que después de la cuarta es que ya van los dos bailones directamente a mirar cómo pueden ir al revolcón en el catre más cercano?

Perdonen que pise la raya de picadores de lo porno, pero no es culpa mía. Es del Ayuntamiento, que en el Plan mencionado facilita el material. Vamos, que el Ayuntamiento es desde 2008 como una "sex shop" gratis total. Pues para esos Talleres facilita, y cito textualmente, "materiales de apoyo, como modelados de vulvas y penes, preservativos masculinos y femeninos"...y otras cochinerías. Entre ellas, las 7.000 monodosis de "lubricante de uso vaginal y anal" que ha sacado a concurso el alcalde Espadas. Quien en este punto le ha pegado una importante puñalá trapera a su antecesor Zoido, el que le ganó las elecciones cuya alcaldía le mangó pactando con la ultraizquierda para ser alcalde. Porque han dicho en el Ayuntamiento que como Zoido (a pesar de sus 20 concejales, 20) continuó sin cambiar nada y siguió con las guarreridas españolas del "Plan de la Salud Afectiva Sexual de los sevillanos y las sevillanas" para el rumba, rumba, material de prácticas no les faltaba. Que Zoido, al irse, dejó el almacén de preservativos hasta la corcha; vamos, como la extinta tienda La Preventiva de la calle Rivero, pero sin la mugrienta cortina de la entrada. Que les sobran preservativos de cuando Zoido, pero que les falta lubricante por detrás y por delante.

Cachondeíto en La Condomina aparte, me parece muy bien que haya talleres escolares de estas cosas. Fundamentalmente, para evitar "la leña del venéreo", que decía El Beni, y los embarazos no deseados. Pero digo yo: igual que hay Talleres de Protección de la Salud Sexual, ¿por qué no ponen en los institutos y escuelas Talleres de Primeros Auxilios? Clases donde un día vayan especialistas de Urgencias Médicas, y otro de la Policía, y otro de los Bomberos, y otro de Protección Civil, y enseñen desde reanimación con el boca a boca a qué hacer (y qué no hacer bajo ningún concepto) si alguien se atraganta con un trozo de carne en un bar, o si sale ardiendo tu casa. Talleres donde expliquen qué hacer y qué no hacer en caso de terremoto, de parada cardíaca, de riada, de encontrarse con heridos en un accidente de tráfico. Porque está muy bien poner los medios para evitar embarazos no deseados o la leña del venéreo, pero estaría mucho mejor si eso se completara con enseñanzas prácticas para salvar vidas. Con algo tan simple como enseñar a hacer la respiración artificial boca a boca o recibir instrucciones de cómo proceder si alguien se atraganta a tu lado y se está asfixiando. En la Enseñanza de Primeros Auxilios sí que harían falta más de las 7.000 monodosis que va a comprar Espadas para el muy lubrificado chucuchucu del tracatrá del aquí te pillo y aquí te mato, ora poniéndola mirando a Rota, ora poniéndolo mirando pá Toledo.

 

CorreoSi quiere usted enviar algún comentario sobre este artículo puede hacerlo a este correo electrónico  Correo

            

 

Artículos de días anteriores

                                      Correo Correo            

Clic para ir a la portada

¿QUIÉN HACE ESTO?

Biografía de Antonio Burgos


 

 

Copyright © 1998 Arco del Postigo S.L. Sevilla, España. 
¿Qué puede encontrar en cada sección de El RedCuadro ?PINCHE AQUI PARA IR AL  "MAPA DE WEB"
 

 

 


 

Página principal-Inicio