ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


ABC de Sevilla,  16 de noviembre de 2018
                               
 

La Sevilla de "Cuéntame"

Venía la noticia casi perdida en las páginas locales de un periódico y me acordé de la sevillana actriz María Galiana: "Un hotel ocupará la parcela donde se levantaba la derribada fábrica de Yoplait". El yogur Yoplait, ¡qué antigüedad! Parece escapado del censo de comparaciones populares sevillanas:

-- ¡Anda que eres más antiguo que el yogur Yoplait!

Me acordé de María Galiana porque, sin que lo advirtamos, se nos está yendo toda la Sevilla de la España representada en la serie "Cuéntame" de TVE, en la que tantos jornales lleva ganados mi admirada y carretera María Galiana. Ya la gente no sólo no se acuerda del Yoplait, sino ni siquiera de dónde estaba su fábrica: en la entonces llamada "Autopista de San Pablo", a la altura del cruce con el Parque Alcosa. Pero es que la gente se acuerda menos todavía, en este "Cuéntame" de Sevilla, de que la fábrica de Yoplait sustituyó a lo que en su momento fue el máximo de las modernidades en materia de alimentación: la Central Lechera, con sus botellas de cristal. ¿Lo de "blanco y en botella"? Bueno, pues así era la leche de la Central donde trabajaba el muy activo e inquieto concejal Cayetano Domínguez, amigo y correligionario por lo bajinis de quienes fundaron entre la librería de Alfonso Guerra y el despacho laboralista de Capitán Vigueras el PSOE Renovado del que surgió la figura de Felipe González en el congreso histórico de Suresnes, localidad cercana a París en la que ahora, a los 100 años del fin de la Gran Guerra, nos hemos enterado que está el cementerio militar de los soldados norteamericanos caídos en aquel conflicto de la batalla de Verdún y de la penosa conflagración de las trincheras de "Sin novedad en el frente".

Hasta que se creó la Central Lechera, Sevilla estaba llena de vaquerías que vendían la leche o bien en los despachos del ramo, o bien por las casas, siempre a granel. Era de venta libre, apenas sin control sanitario, hasta la creación de esta Central Lechera donde los vaqueros tenían que llevarla obligatoriamente. Esta leche a granel había que hervirla, porque no sabíamos en qué condiciones estaba...ni el agua que le habían añadido entre el vaquero y el lechero.

Relaciono el derribo de la Central Lechera de las blancas botellas de cristal que recogían la producción de las vaquerías sevillanas y donde luego se fabricó el Yoplait con otro trozo de la Sevilla del "Cuéntame" que se nos acaba de ir: "Vilima, Lagar 2", como decía el anuncio de la radio. Un lector me puso el otro día un mensaje lleno de nostalgia: en la obra del hotel que van a hacer en el que fue gran almacén de la familia Lirola y competencia sevillana del Cortinglés, estaban retirando el rótulo de "Vilima". ¿Dónde habrá ido a parar? Seguramente a una chatarrería del Polígono El Manchón, donde llegan los rumanos con sus carritos de supermercado llenísimos, para vender todo lo de metal que han arramplado por los contenedores, en la barojiana busca. El rótulo de Yoplait y el rótulo de Vilima, por sí solos, hubieran constituido una sala importante en el Museo de la Nostalgia de aquella Sevilla que, ya digo, es la del "Cuéntame", pero sin que María Galiana tenga que salir con su toquilla de punto casero haciendo de abuela. Pocos se acordarán ya del "Zafarrancho Vilima" cuando vean cómo se va levantando el nuevo hotel, otro, entre Lineros y Lagar. Como nadie se acuerda al pasar por la esquina de Tetuán con Rioja de otro clásico de esa época: los Galerías San Sebastián. Ni de su anuncio por la radio: "Almacenes Puente y Pellón y Galerías San Sebastián". Que si mal no recuerdo patrocinaban el programa de radio "Conozca usted a sus vecinos", donde sus vecinos de usted cantaban por el teléfono unas canciones muy desafinadas y muy malamente, pero que a la radio y a esos comercios, y a la audiencia, les daban el avío. ¿Y Las Siete Puertas en la calle que ya nadie llama por su nombre histórico de Dados ("Daos", a la sevillana), sino Puente y Pellón? "Siete, siete, Siete Puertas, usted tiene la ventaja". Ahora allí hay un chino. ¿Y Muebles Rodri: "¿ha dicho Rodri?"? ¿Y la cadena de cafeterías de Catunambú? Podría seguir evocándoles esta Sevilla del "Cuentame" que, como agua entre las manos, se nos está yendo, por lo que me pongo en la bocamanga ante el teclado las estrellas de coronel para que tenga quien le escriba.

 

 

 

 

 

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