ANTONIO BURGOS | EL RECUADRO


ABC de Sevilla,  22 de abril de 2019
                               
 

Los Tequiyá

Si no fuera asunto tan serio, grave y preocupante la detención en Marruecos de Zouhair Al Bouddidi, el hijo del imán de la Mezquita de Su Eminencia, era para tomárselo a pitorreo. Empezando por la Mezquita de Su Eminencia. Hemos hecho tópico, querido Francisco Robles, decir que Sevilla es una ciudad dual. Y no me negarás que es ya el colmo de las dualidades barrocas esto de "la mezquita de Su Eminencia". Vuelvo a insistir que no cargo la suerte porque es un asunto muy grave del que nos hemos librado en la Semana Santa (y después diré cómo y por qué). Pero ahora apunto que esto de "La Mezquita de Su Eminencia" parece como si en vez de parte de la calle Placentines, Sevilla le hubieran dedicado gloriosamente a Amigo Vallejo una mezquita: la "Mezquita de Su Eminencia Reverendísima el Cardenal Don Carlos Amigo", sin poner en azulejos su nombre en la que fue la Casa de los Seises, propiedad del Arzobispado, donde Don Ángel Urcelay los ensayaba para el Corpus y la Purísima.

Para mí que la feliz detención de este mamón de yijadista que quería inmolarse, como dicen ellos, o sea, suicidarse como hombre-bomba para matar cristianos, ha sido como una segunda edición de la providencial de Parot, el asesino etarra que quería provocar una masacre con un coche-bomba en el aparcamiento de La Gavidia y fue detenido a tiempo por la Guardia Civil, no sin gran riesgo para los heroicos picoletos. Será que creo en Dios y sostengo que está en San Lorenzo, y su Madre junto a los dos Arcos, el de la Macarena y el del Postigo, pero para mí que Sevilla tiene una especial protección divina en estas cuestiones de las matanzas masivas que planea el terrorismo, sea de los asesinos de la ETA, sea de los criminales sanguinarios de la Yijad Islámica. Por eso creo que no estaría de más que Sevilla le diera la gracias a Dios por su protección para librar a la Semana Santa del terrorismo islamista. Perdonen, pero servidor cree en los milagros, y sé que en Sevilla, y especialmente en sus cofradías, no faltarán iniciativas para dar las gracias al Cielo, que no se tiñó de rojo de tragedia: sólo quedó en la granizada del Jueves Santo y en el tormentón de eso tan clásico del Cachorro sin salir, ¿verdad, Rosco? Y creo también en la eficacia de la Policía Nacional, de la Guardia Civil y del CNI. También debería dar las gracias Sevilla oficialmente a la Seguridad del Estado por haber trincado a tiempo al niñato del imán de la mezquita, como se las dio a los guardias civiles que detuvieron al malhadado Parot.

Y aunque todo esto es muy serio, hay una parte en este proyectado atentado masivo, del que Dios nos ha librado en su Semana Santa, que es digno de toda chanza sobre estos malditos hijos de Alá. La detención del que iba a teñir a Sevilla de sangre en Semana Santa tiene más mérito por lo disimulones que son estos hideputas, a muchos de los cuales, por cierto, el Estado les concede toda clase de atenciones y ayudas. Son tan malvados los que quieren matar cristianos al grito como del pasodoble de Marcial, lo de "Alá, eres el más grande, se ve que eres cabileño", que muchos de ellos van de lobos disfrazados de ovejas. Disimulan lo que son haciendo todo lo contrario que se piensa en buena lógica: se ponen púos de alcohol contra lo que dice el Corán, conceden igualdad a las mujeres, y hasta capaces son de "hacerse hermanos de una santa cofradía". A este disimulo que les permite pasar inadvertidos en la sociedad le llaman los tíos "la taqiyya". Sí, suena a calle Adriano y al Bar Taquilla. Pero suena a algo más sevillano: al "tequiyá". ¿A que "Los Tequiyá" parecen una chirigota de Sevilla que fuese al Falla? Bueno, pues de ésos nos protegió Dios y nos libró la Seguridad del Estado. Y es lo que Sevilla les ha dicho en estos días de emociones a estos asesinos: "¡Tequiyá con el terrorismo islamista, so mamón!".

 

Correo Correo Si quiere usted enviar algún comentario sobre este artículo puede hacerlo a este correo electrónico

         

 

 

                                      Correo Correo            

Clic para ir a la portada

¿QUIÉN HACE ESTO?

Biografía de Antonio Burgos


 

 

Copyright © 1998 Arco del Postigo S.L. Sevilla, España. 
¿Qué puede encontrar en cada sección de El RedCuadro ?PINCHE AQUI PARA IR AL  "MAPA DE WEB"
 

 

 


 

Página principal-Inicio