Explicación de la "eliminación" del mendigo del
contenedor
Iniciales:
Francisco T.D. Profesión: mendigo por el plan antiguo, asimilado a la nueva titilación
de "marginado social" con que la sociedad que lo margina se lava más blanco la
mala conciencia. Edad: 27 años. Resumen de lo publicado: en la madrugada de frío de
noviembre, Francisco T.D., que tiene un dormitorio tan grande que ocupa todas las calles
de la ciudad, sus portales, los cubículos de los cajeros automáticos de los bancos, como
no podía desafiar las bajas temperaturas con su ajuar de cartones y sus edredones de
papel de periódicos, decidió meterse en un contenedor de basuras. Esto no ocurría en el
Tercer Mundo que recibe la solidaridad de las ONG, en la calle de los niños del Brasil.
Pasaba en Sevilla, donde es voz común que no hace frío, y que todo es alegría,
"qué calidad de vida tenéis, chico", pero donde en las largas noches de la
humedad del otoño, los mendigos se tienen que meter en el portal de un contenedor de
basura, desgarrado y anticipado cuento de Navidad-
Y ocurrió lo que tenía que
ocurrir. Llegó de madrugada el camión de la basura, se bajó el conductor, cogió el
contenedor, lo elevó sobre la caja y volcó su contenedor sobre las palas cortantes de la
trituradora. Las cuchillas de la enorme turmix de la basura comenzaron al punto a
cortar el aire de la noche, con los gritos sangrientos de Francisco T.D. A todos nos
despierta siempre el camión de la basura cuando pasa con su trituradora, pero no como
despertó a Francisco T.D. que aunque el basurero paró la máquina, no pudo evitar que lo
medio cortara a trozos.
Bien pensado, lo de Francisco
T.D. es lo que ocurre todas las noches, sólo que sin camión triturador de la basura.
Esta sociedad de tan buena conciencia es tan limpia que termina con las basuras
llamándolas con chocantería "residuos sólidos urbanos". ¿Qué son los
mendigos, los que duermen con cartones en los túneles del metro, sino tristes residuos
sólidos urbanos"? El camión de la basura de Sevilla hizo a las bravas lo que en
muchos otros lugares se hace de modo más refinado. Dicen que las cuchillas de la
trituradora cortaron el cuerpo del mendigo a rodajas. Gracias a Dios, vive. Como viven
muchos otros mendigos, que son cortados cada noche a rodajas de olvidos. Pero no pasa
nada. A todo lo incómodo y de difícil eliminación que produce esta sociedad de tarjeta
de crédito lo llamamos "residuos sólidos urbanos". Algunas veces se les oye
gritar cuando los van a eliminar. En la mayoría de las ocasiones, ni gritan siquiera.